Friday, March 28, 2014

El Señor es el único Dios

Además de recordarnos de boca de Nuestro Señor Jesucristo sobre la importancia del mandamiento del amor, la Sagrada Palabra de hoy hace énfasis en la importancia de amar y respetar a Dios como el centro de nuestra vida, como Creador del Universo, con base de nuestro actuar. No hay otro dios, no hay más nadie en quien fortalecernos, sólo Él nos salva y nos dio incluso por amor a su hijo como signo de reconciliación, ade paz y de salvación.

Oseas 14,2-10.

Así habla el Señor: 
Vuelve, Israel, al Señor tu Dios, porque tu falta te ha hecho caer. 
Preparen lo que van decir y vuelvan al Señor. Díganle: "Borra todas las faltas, acepta lo que hay de bueno, y te ofreceremos el fruto de nuestros labios. 
Asiria no nos salvará, ya no montaremos a caballo, ni diremos más "¡Dios nuestro!" a la obra de nuestras manos, porque sólo en ti el huérfano encuentra compasión". 
Yo los curaré de su apostasía, los amaré generosamente, porque mi ira se ha apartado de ellos. 
Seré como rocío para Israel: él florecerá como el lirio, hundirá sus raíces como el bosque del Líbano; 
sus retoños se extenderán, su esplendor será como el del olivo y su fragancia como la del Líbano. 
Volverán a sentarse a mi sombra, harán revivir el trigo, florecerán como la viña, y su renombre será como el del vino del Líbano. 
Efraím, ¿qué tengo aún que ver con los ídolos? Yo le respondo y velo por él. Soy como un ciprés siempre verde, y de mí procede tu fruto. 
¡Que el sabio comprenda estas cosas! ¡Que el hombre inteligente las entienda! Los caminos del Señor son rectos: por ellos caminarán los justos, pero los rebeldes tropezarán en ellos. 

Salmo 81(80),6c-8a.8bc-9.10-11ab.14.17.

Oigo una voz desconocida que dice:
Yo quité el peso de tus espaldas 
y tus manos quedaron libres de la carga.
Clamaste en la aflicción, y te salvé.

Te respondí oculto entre los truenos,
aunque me provocaste junto a las aguas de Meribá.
Oye, pueblo mío, yo atestiguo contra ti, 
¡ojalá me escucharas, Israel!

No tendrás ningún Dios extraño, 
no adorarás a ningún dios extranjero:
yo, el Señor, soy tu Dios, 
que te hice subir de la tierra de Egipto. 

¡Ojalá mi pueblo me escuchara, 
e Israel siguiera mis caminos!
Yo alimentaría a mi pueblo con lo mejor del trigo 
y lo saciaría con miel silvestre».

Marcos 12,28b-34.

Un escriba se acercó a Jesús y le preguntó: «¿Cuál es el primero de los mandamientos?».
Jesús respondió: "El primero es: Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor; 
y tú amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, con todo tu espíritu y con todas tus fuerzas. 
El segundo es: Amarás a tu prójimo como a tí mismo. No hay otro mandamiento más grande que estos". 
El escriba le dijo: "Muy bien, Maestro, tienes razón al decir que hay un solo Dios y no hay otro más que él, 
y que amarlo con todo el corazón, con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a sí mismo, vale más que todos los holocaustos y todos los sacrificios". 
Jesús, al ver que había respondido tan acertadamente, le dijo: "Tú no estás lejos del Reino de Dios". Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas. 

Thursday, March 27, 2014

Cuando un hombre fuerte y bien armado hace guardia en su palacio, todas sus posesiones están seguras

Estamos ya a 27 de marzo de 2014, el año pasa rápido y la invitación de la palabra de hoy es a mantenernos fuertes y preparados para que el enemigo no entre en nosotros y nos venza. Creo que una de las mejores formas para prepararnos es, sin duda, la oración constante y fervorosa. Dios siempre nos escucha y si oramos insistentemente y actuamos de acuerdo con su Palabra Santa, el enemigo no nos encontrará desprotegidos y no podrá arrebatarnos le paz y el amor que el Padre ha engendrado en nosotros.

Jeremías 7,23-28.

Así habla el Señor: 
Esta fue la orden que les di: Escuchen mi voz, así yo seré su Dios y ustedes serán mi Pueblo; sigan por el camino que yo les ordeno, a fin de que les vaya bien. 
Pero ellos no escucharon ni inclinaron sus oídos, sino que obraron según sus designios, según los impulsos de su corazón obstinado y perverso; se volvieron hacia atrás, no hacia adelante. 
Desde el día en que sus padres salieron de Egipto hasta el día de hoy, yo les envié a todos mis servidores los profetas, los envié incansablemente, día tras día. 
Pero ellos no me escucharon ni inclinaron sus oídos, sino que se obstinaron y obraron peor que sus padres. 
Tú les dirás todas estas palabras y no te escucharán: los llamarás y no te responderán. 
Entonces les dirás: "Esta es la nación que no ha escuchado la voz del Señor, su Dios, ni ha recibido la lección. La verdad ha desaparecido, ha sido arrancada de su boca". 


Salmo 95(94),1-2.6-7.8-9.

¡Vengan, cantemos con júbilo al Señor, 
aclamemos a la Roca que nos salva!
¡Lleguemos hasta él dándole gracias, 
aclamemos con música al Señor!

¡Entren, inclinémonos para adorarlo! 
¡Doblemos la rodilla ante el Señor que nos creó!
Porque él es nuestro Dios, 
y nosotros, el pueblo que él apacienta, 
las ovejas conducidas por su mano.

Ojalá hoy escuchen la voz del Señor: 
«No endurezcan su corazón como en Meribá, 
como en el día de Masá, en el desierto,
cuando sus padres me tentaron y provocaron, 
aunque habían visto mis obras.»

Santo Evangelio según San Lucas 11,14-23.

Jesús estaba expulsando a un demonio que era mudo. Apenas salió el demonio, el mudo empezó a hablar. La muchedumbre quedó admirada, 
pero algunos de ellos decían: "Este expulsa a los demonios por el poder de Belzebul, el Príncipe de los demonios". 
Otros, para ponerlo a prueba, exigían de él un signo que viniera del cielo. 
Jesús, que conocía sus pensamientos, les dijo: "Un reino donde hay luchas internas va a la ruina y sus casas caen una sobre otra. 
Si Satanás lucha contra sí mismo, ¿cómo podrá subsistir su reino? Porque -como ustedes dicen- yo expulso a los demonios con el poder de Belzebul. 
Si yo expulso a los demonios con el poder de Belzebul, ¿con qué poder los expulsan los discípulos de ustedes? Por eso, ustedes los tendrán a ellos como jueces. 
Pero si yo expulso a los demonios con la fuerza del dedo de Dios, quiere decir que el Reino de Dios ha llegado a ustedes. 
Cuando un hombre fuerte y bien armado hace guardia en su palacio, todas sus posesiones están seguras, 
pero si viene otro más fuerte que él y lo domina, le quita el arma en la que confiaba y reparte sus bienes. 
El que no está conmigo, está contra mí; y el que no recoge conmigo, desparrama.

Tuesday, March 25, 2014

Solemnidad de la Anunciación del Señor

De la Anunciación de Nuestro Señor Jesucristo, un hecho en particular ha llamado siempre mi atención, un hecho con el que quisiera asumir cada instante de mi vida: la humildad y la aceptación de la Voluntad del Padre, sin poner ninguna objeción, es decir, aquella que hizo la Santísima Virgen María cuando el Santo Argángel Gabriel la saluda y le comunica que será la madre del redentor de la humanidad.  Dios en su infinita grandeza no abusa de su poder, sino que por el contrario busca la aprobación de María, respetando en todo caso su libre elvedrío. Y ella con mobleza y amor acepta diciendo "hágase en mí según tu palabra" y así la palabra se hizo hombre.

Ojalá algún día todos podemos aceptar con abundante amor como el de María lo que el Padre va poniendo en nuestras vidad, ojalá aprendamos de ella, ojalá...

Isaías 7,10-14.8,10c.
El Señor habló a Ajaz en estos términos:
"Pide para ti un signo de parte del Señor, en lo profundo del Abismo, o arriba, en las alturas".
Pero Ajaz respondió: "No lo pediré ni tentaré al Señor".
Isaías dijo: "Escuchen, entonces, casa de David: ¿Acaso no les basta cansar a los hombres, que cansan también a mi Dios?.
Por eso el Señor mismo les dará un signo. Miren, la joven está embarazada y dará a luz un hijo, y lo llamará con el nombre de Emmanuel, que significa "Dios-con-nosotros"."
Porque Dios está con nosotros.

Salmo 40(39),7-8a.8b-9.10.11.

Tú no quisiste víctima ni oblación;
pero me diste un oído atento;
no pediste holocaustos ni sacrificios,
entonces dije: «Aquí estoy.

En el libro de la Ley está escrito
lo que tengo que hacer:
yo amo, Dios mío, tu voluntad,
y tu ley está en mi corazón.»

Proclamé gozosamente tu justicia
en la gran asamblea;
no, no mantuve cerrados mis labios,
tú lo sabes, Señor.

No escondí tu justicia dentro de mí,
proclamé tu fidelidad y tu salvación,
y no oculté a la gran asamblea
tu amor y tu fidelidad.


Hebreos 10,4-10.

Hermanos:
Es imposible que la sangre de toros y chivos quite los pecados.
Por eso, Cristo, al entrar en el mundo, dijo:
Tú no has querido sacrificio ni oblación; en cambio, me has dado un cuerpo.
No has mirado con agrado los holocaustos ni los sacrificios expiatorios.
Entonces dije:
Aquí estoy, yo vengo -como está escrito de mí en el libro de la Ley- para hacer, Dios, tu voluntad.
El comienza diciendo: Tú no has querido ni has mirado con agrado los sacrificios, los holocaustos, ni los sacrificios expiatorios, a pesar de que están prescritos por la Ley.
Y luego añade: Aquí estoy, yo vengo para hacer tu voluntad. Así declara abolido el primer régimen para establecer el segundo.
Y en virtud de esta voluntad quedamos santificados por la oblación del cuerpo de Jesucristo, hecha de una vez para siempre.

Santo Evangelio
Lucas 1,26-38.
En el sexto mes, el Angel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret,
a una virgen que estaba comprometida con un hombre perteneciente a la familia de David, llamado José. El nombre de la virgen era María.
El Angel entró en su casa y la saludó, diciendo: "¡Alégrate!, llena de gracia, el Señor está contigo".
Al oír estas palabras, ella quedó desconcertada y se preguntaba qué podía significar ese saludo.
Pero el Angel le dijo: "No temas, María, porque Dios te ha favorecido.
Concebirás y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús;
él será grande y será llamado Hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre,
reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin".
María dijo al Angel: "¿Cómo puede ser eso, si yo no tengo relaciones con ningún hombre?".
El Angel le respondió: "El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso el niño será Santo y será llamado Hijo de Dios.
También tu parienta Isabel concibió un hijo a pesar de su vejez, y la que era considerada estéril, ya se encuentra en su sexto mes,
porque no hay nada imposible para Dios".
María dijo entonces: "Yo soy la servidora del Señor, que se cumpla en mí lo que has dicho". Y el Angel se alejó.

Friday, March 14, 2014

Dios es perdón

A veces no nos damos la oportunidad de disfrutar y aprovechar para nuestro bien todo el perdón que Dios nos ofrece, entonces, preferimos seguir en el pecado y en nuestras malas acciones en cambio de poner nuestras debilidades en aquel que todo lo puede y que puiede transformar nuestras faltas en fortaleza brindándonos perdón y reconciliación con la vida, con el universo y con Él en toda su Santa Escencia.

Ezequiel 18,21-28.

Pero si el malvado se convierte de todos los pecados que ha cometido, observa todos mis preceptos y practica el derecho y la justicia, seguramente vivirá, y no morirá.
Ninguna de las ofensas que haya cometido le será recordada: a causa de la justicia que ha practicado, vivirá.
¿Acaso deseo yo la muerte del pecador -oráculo del Señor- y no que se convierta de su mala conducta y viva?
Pero si el justo se aparta de su justicia y comete el mal, imitando todas las abominaciones que comete el malvado, ¿acaso vivirá? Ninguna de las obras justas que haya hecho será recordada: a causa de la infidelidad y del pecado que ha cometido, morirá.
Ustedes dirán: "El proceder del Señor no es correcto". Escucha, casa de Israel: ¿Acaso no es el proceder de ustedes, y no el mío, el que no es correcto?
Cuando el justo se aparta de su justicia, comete el mal y muere, muere por el mal que ha cometido.
Y cuando el malvado se aparta del mal que ha cometido, para practicar el derecho y la justicia, él mismo preserva su vida.
El ha abierto los ojos y se ha convertido de todas las ofensas que había cometido: por eso, seguramente vivirá, y no morirá.

Salmo 130(129),1-2.3-4.6.7-8.

Desde el abismo clamo a ti, Señor,
¡Señor, escucha mi voz!
que tus oídos pongan atención
al clamor de mis súplicas!

Señor, si no te olvidas de las faltas,
Adonai, ¿quién podrá subsistir?
Pero de ti procede el perdón, y así se te venera.

mi alma cuenta con el Señor,
más que con la aurora el centinela.
Como confía en la aurora el centinela,
así Israel confíe en el Señor;
porque junto al Señor está su bondad
y la abundancia de sus liberaciones,

y él liberará a Israel
de todas sus culpas.

Mateo 5,20-26.
Les aseguro que si la justicia de ustedes no es superior a la de los escribas y fariseos, no entrarán en el Reino de los Cielos.
Ustedes han oído que se dijo a los antepasados: No matarás, y el que mata, debe ser llevado ante el tribunal.
Pero yo les digo que todo aquel que se irrita contra su hermano, merece ser condenado por un tribunal. Y todo aquel que lo insulta, merece ser castigado por el Sanedrín. Y el que lo maldice, merece la Gehena de fuego.
Por lo tanto, si al presentar tu ofrenda en el altar, te acuerdas de que tu hermano tiene alguna queja contra ti,
deja tu ofrenda ante el altar, ve a reconciliarte con tu hermano, y sólo entonces vuelve a presentar tu ofrenda.
Trata de llegar en seguida a un acuerdo con tu adversario, mientras vas caminando con él, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al guardia, y te pongan preso.
Te aseguro que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último centavo.

Thursday, March 13, 2014

Jesús dijo: "Pidan y se les dará"

En ocasiones (o generalmente), no sabemos cómo pedirle al Padre quien todo nos lo concede. De repente, el problema radica en que tampoco sabemos qué pedirle, ya que por lo general, nuestras peticiones están más destinadas a satisfacer las necesidades del ego que lo que en verdad requiere nuestro corazón. 

La invitación de hoy, acorde con las palabras de Nuestro Señor Jesucritso0, están orientadas a pedir la Iluminación del Espíritu Santo para que nos indique qué es lo que realmente debemos pedir, para que nos muestre los deseos de nuestro corazón y no los deseos del ego que siemprre nos hacen añorar bienes materiales que ni siquiera necesitamos.

Ester 14,1.3-5.12-14.
En aquellos días, la reina Ester, temiendo el peligro inminente,
acudió al Señor y rezó así al Señor, Dios de Israel: "Señor mío, único rey nuestro. Protégeme, que estoy sola y no tengo otro defensor fuera de ti,
pues yo misma me he expuesto al peligro.
Desde mi infancia oí, en el seno de mi familia, cómo tú, Señor, escogiste a Israel entre las naciones, a nuestros padres entre todos sus antepasados, para ser tu heredad perpetua; y les cumpliste lo que habías prometido.
Atiende, Señor, muéstrate a nosotros en la tribulación, y dame valor, Señor, rey de los dioses y señor de poderosos.
Pon en mi boca un discurso acertado cuando tenga que hablar al león; haz que cambie y aborrezca a nuestro enemigo, para que perezca con todos sus cómplices.
A nosotros, líbranos con tu mano; y a mí, que no tengo otro auxilio fuera de ti, protégeme tú, Señor, que lo sabes todo."

Salmo 138(137),1-2a.2bc-3.7c-8.

Te doy gracias, Señor, de todo corazón,
pues oíste las palabras de mi boca.
Canto para ti en presencia de los ángeles,
y me postro ante tu Templo santo.

Doy gracias a tu nombre por tu amor y tu verdad,
pues tu palabra ha superado tu renombre.
El día en que clamé, me respondiste
y aumentaste la fuerza en mi alma.

con tu mano paras al enemigo
y tu diestra me salva.
El Señor lo hará todo por mí,
Señor, tu amor perdura para siempre,
no abandones la obra de tus manos.

Santo Evangelio
Mateo 7,7-12.
Jesús dijo a sus discípulos: Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá.
Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá.
¿Quién de ustedes, cuando su hijo le pide pan, le da una piedra?
¿O si le pide un pez, le da una serpiente?
Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará cosas buenas a aquellos que se las pidan!
Todo lo que deseen que los demás hagan por ustedes, háganlo por ellos: en esto consiste la Ley y los Profetas.

Tuesday, March 11, 2014

La Palabra y la oración deben estar presentes en nuestras vidas

La invitación que nos hace la Palabra de Dios hoy (Marzo 11 de 2014) es a apropiarnos de la Palabra del Señor, no podemos dejar bajo ninguna circunstancia que vuelva estéril a Dios Todopoderoso, por el contrario como la buena semilla, puede creer, fortalecernos y volver entonces al Creador del Universo. Y una forma de fortalecer esa Palabra es la oración y nada mejor que el Padre Nuestro que hoy nos enseña Nuestro Señor Jesucristo a través del Evangelio. Meditemos cada una de sus palabras y hagámoslas p´ractica diaria en nuestra vida.

Isaías 55,10-11.

Así habla el Señor: Así como la lluvia y la nieve descienden del cielo y no vuelven a él sin haber empapado la tierra, sin haberla fecundado y hecho germinar, para que dé la semilla al sembrador y el pan al que come, 
así sucede con la palabra que sale de mi boca: ella no vuelve a mí estéril, sino que realiza todo lo que yo quiero y cumple la misión que yo le encomendé. 

Salmo 34(33),4-5.6-7.16-17.18-19.

Engrandezcan conmigo al Señor 
y ensalcemos a una su nombre.
Busqué al Señor y me dio una respuesta 
y me libró de todos mis temores.

Mírenlo a él y serán iluminados 
y no tendrán más cara de frustrados.
Este pobre gritó y el Señor lo escuchó, 
y lo salvó de todas sus angustias.

Pero tiene puestos sus ojos en los justos 
y sus oídos pendientes de sus clamores.
El Señor aparta su cara de los malos 
y borra de la tierra su recuerdo.

En cuanto gritan, el Señor escucha, 
y los libra de todas sus angustias.
El Señor está cerca del corazón deshecho 
y salva a los de espíritu abatido.

Mateo 6,7-15.

Jesús dijo a sus discípulos: 
Cuando oren, no hablen mucho, como hacen los paganos: ellos creen que por mucho hablar serán escuchados. 
No hagan como ellos, porque el Padre que está en el cielo sabe bien qué es lo que les hace falta, antes de que se lo pidan. 
Ustedes oren de esta manera: Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre, 
que venga tu Reino, que se haga tu voluntad en la tierra como en el cielo. 
Danos hoy nuestro pan de cada día. 
Perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a los que nos han ofendido. 
No nos dejes caer en la tentación, sino líbranos del mal. 
Si perdonan sus faltas a los demás, el Padre que está en el cielo también los perdonará a ustedes. 
Pero si no perdonan a los demás, tampoco el Padre los perdonará a ustedes. 

Monday, March 10, 2014

La justicia del Señor es perfceta y sus palabras sabias

Nos queda claro con la palabra de hoy (10 de marzo de 2014) que Dios es perfecto, y por ser hijos suyos quiere que también lo seamos. No nos pide cosas extraordinarias, más bien nos sugiere acciones simples con las que haremos justicia a nuestros hermanos, e intrínsecamente lo haremos con Él.

Levítico 19,1-2.11-18.
El Señor dijo a Moisés:
Habla en estos términos a toda la comunidad de Israel: Ustedes serán santos, porque yo, el Señor su Dios, soy santo.
Ustedes no robarán, no mentirán ni se engañarán unos a otros.
No jurarán en falso por mi Nombre, porque profanarían el nombre de su Dios. Yo soy el Señor.
No oprimirás a tu prójimo ni lo despojarás; y no retendrás hasta la mañana siguiente el salario del jornalero.
No insultarás a un ciego, sino que temerás a tu Dios. Yo soy el Señor.
No cometerás ninguna injusticia en los juicios. No favorecerás arbitrariamente al pobre ni te mostrarás complaciente con el rico: juzgarás a tu prójimo con justicia.
No difamarás a tus compatriotas, ni pondrás en peligro la vida de tu prójimo. Yo soy el señor.
No odiarás a tu hermano en tu corazón: deberás reprenderlo convenientemente, para no cargar con un pecado a causa de él.
No serás vengativo con tus compatriotas ni les guardarás rencor. Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo soy el Señor.

Salmo 19(18),8.9.10.15.

La ley del Señor es perfecta,
es remedio para el alma,
toda declaración del Señor es cierta
y da al sencillo la sabiduría.

Las ordenanzas del Señor son rectas
y para el corazón son alegría.
Los mandamientos del Señor son claros
y son luz para los ojos.

El temor del Señor es un diamante,
que dura para siempre;
los juicios del Señor son verdad,
y todos por igual se verifican.

¡Ojalá te gusten las palabras de mi boca,
esta meditación a solas ante ti,
oh Señor, mi Roca y Redentor!

Santo Evanvelio
Mateo 25,31-46.

Jesús dijo a sus discípulos:
"Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria rodeado de todos los ángeles, se sentará en su trono glorioso.
Todas las naciones serán reunidas en su presencia, y él separará a unos de otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos,
y pondrá a aquellas a su derecha y a estos a su izquierda.
Entonces el Rey dirá a los que tenga a su derecha: 'Vengan, benditos de mi Padre, y reciban en herencia el Reino que les fue preparado desde el comienzo del mundo,
porque tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; estaba de paso, y me alojaron;
desnudo, y me vistieron; enfermo, y me visitaron; preso, y me vinieron a ver'.
Los justos le responderán: 'Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer; sediento, y te dimos de beber?
¿Cuándo te vimos de paso, y te alojamos; desnudo, y te vestimos?
¿Cuándo te vimos enfermo o preso, y fuimos a verte?'.
Y el Rey les responderá: 'Les aseguro que cada vez que lo hicieron con el más pequeño de mis hermanos, lo hicieron conmigo'.
Luego dirá a los de su izquierda: 'Aléjense de mí, malditos; vayan al fuego eterno que fue preparado para el demonio y sus ángeles,
porque tuve hambre, y ustedes no me dieron de comer; tuve sed, y no me dieron de beber;
estaba de paso, y no me alojaron; desnudo, y no me vistieron; enfermo y preso, y no me visitaron'.
Estos, a su vez, le preguntarán: 'Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento, de paso o desnudo, enfermo o preso, y no te hemos socorrido?'.
Y él les responderá: 'Les aseguro que cada vez que no lo hicieron con el más pequeño de mis hermanos, tampoco lo hicieron conmigo'.
Estos irán al castigo eterno, y los justos a la Vida eterna".

Wednesday, March 5, 2014

Miércoles de ceniza

La axhortación de San Pablo debe tocar hoy nuestros corazones con especial atención. No sólo los discípulos a quienes en aquel entonces sino todos los cristianos, debemos ser embajadores de Cristo y como enviados tenemos la responsabilidad de demostrar esa responsabilidad con nuestras acciones, con el amor, el perdón y el agradecimiento que darán testimonio de nosotros siempre.

Joel 2,12-18.
Ahora dice el Señor: Vuelvan a mí de todo corazón, con ayuno, llantos y lamentos.
Desgarren su corazón y no sus vestiduras, y vuelvan al Señor, su Dios, porque él es bondadoso y compasivo, lento para la ira y rico en fidelidad, y se arrepiente de tus amenazas.
¡Quién sabe si él no se volverá atrás y se arrepentirá, y dejará detrás de sí una bendición: la ofrenda y la libación para el Señor, su Dios!
¡Toquen la trompeta en Sión, prescriban un ayuno, convoquen a una reunión solemne,
reúnan al pueblo, convoquen a la asamblea, congreguen a los ancianos, reúnan a los pequeños y a los niños de pecho! ¡Que el recién casado salga de su alcoba y la recién casada de su lecho nupcial!
Entre el vestíbulo y el altar lloren los sacerdotes, los ministros del Señor, y digan: "¡Perdona, Señor, a tu pueblo, no entregues tu herencia al oprobio, y que las naciones no se burlen de ella! ¿Por qué se ha de decir entre los pueblos: Dónde está su Dios?".
El Señor se llenó de celos por su tierra y se compadeció de su pueblo.

Salmo 51(50),3-4.5-6a.12-13.14.17.

Ten piedad de mí, oh Dios, en tu bondad,
por tu gran corazón, borra mi falta.
Que mi alma quede limpia de malicia,
purifícame de mi pecado.

Pues mi falta yo bien la conozco
y mi pecado está siempre ante mí;
contra ti, contra ti sólo pequé.

Crea en mí, oh Dios, un corazón puro,
renueva en mi interior un firme espíritu.
No me rechaces lejos de tu rostro
ni me retires tu espíritu santo.

Dame tu salvación que regocija,
y que un espíritu noble me dé fuerza.
Señor, abre mis labios
y cantará mi boca tu alabanza.

San Pablo a los Corintios 2 5,20-21.6,1-2.

Hermanos:
Nosotros somos, entonces, embajadores de Cristo, y es Dios el que exhorta a los hombres por intermedio nuestro. Por eso, les suplicamos en nombre de Cristo: Déjense reconciliar con Dios.
A aquel que no conoció el pecado, Dios lo identificó con el pecado en favor nuestro, a fin de que nosotros seamos justificados por él.
Y porque somos sus colaboradores, los exhortamos a no recibir en vano la gracia de Dios.
Porque él nos dice en la Escritura: En el momento favorable te escuché, y en el día de la salvación te socorrí. Este es el tiempo favorable, este es el día de la salvación.



Mateo 6,1-6.16-18.

Jesús dijo a sus discípulos:
Tengan cuidado de no practicar su justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos: de lo contrario, no recibirán ninguna recompensa del Padre que está en el cielo.
Por lo tanto, cuando des limosna, no lo vayas pregonando delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser honrados por los hombres. Les aseguro que ellos ya tienen su recompensa.
Cuando tú des limosna, que tu mano izquierda ignore lo que hace la derecha,
para que tu limosna quede en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.
Cuando ustedes oren, no hagan como los hipócritas: a ellos les gusta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos. Les aseguro que ellos ya tienen su recompensa.
Tú, en cambio, cuando ores, retírate a tu habitación, cierra la puerta y ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.
Cuando ustedes ayunen, no pongan cara triste, como hacen los hipócritas, que desfiguran su rostro para que se note que ayunan. Les aseguro que con eso, ya han recibido su recompensa.
Tú, en cambio, cuando ayunes, perfuma tu cabeza y lava tu rostro,
para que tu ayuno no sea conocido por los hombres, sino por tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.

Tuesday, March 4, 2014

Manténgase con el Espíritu alerta

En la víspera del miércoles de ceniza (martes 4 de marzo de 2014), la Palabra de Dios nos invita a la obediencia, a poner a cada instante nuestra vida en Jesucristo. No podemos ignorar las palabras que el Padre nos ha enviado, las cuales se materializaron en su hijo Jesucritso, quien con su pasión y muerte nos trajo la salvación y nos sacó de la ignorancia en que vivíamos.

Epístola I de San Pedro 1,10-16.
Hermanos:
Esta salvación ha sido objeto de la búsqueda y la investigación de los profetas que vaticinaron sobre la gracia destinada a ustedes.
Ellos trataban de descubrir el tiempo y las circunstancias señaladas por el Espíritu de Cristo, que estaba presente en ellos y anunciaba anticipadamente los sufrimientos reservados a Cristo y la gloria que les seguiría.
A ellos les fue revelado que estaban al servicio de un mensaje destinado no a sí mismos, sino a ustedes. Y ahora ustedes han recibido el anuncio de ese mensaje por obra de quienes, bajo la acción del Espíritu Santo enviado desde el cielo, les transmitieron la Buena Noticia que los ángeles ansían contemplar.
Por lo tanto, manténganse con el espíritu alerta, vivan sobriamente y pongan toda su esperanza en la gracia que recibirán cuando se manifieste Jesucristo.
Como hijos obedientes, no procedan de acuerdo con los malos deseos que tenían antes, mientras vivían en la ignorancia.
Así como aquel que los llamó es santo, también ustedes sean santos en toda su conducta,
de acuerdo con lo que está escrito: Sean santos, porque yo soy santo.

Salmo 98(97),1.2-3ab.3cd-4.
Entonen al Señor un canto nuevo,
pues ha hecho maravillas,
la salvación provino de su diestra,
de su brazo de santidad.

El Señor dio a conocer su salvación,
hizo ver a los paganos su justicia,
se acordó de su amor y fidelidad
en favor de la casa de Israel.

Todos, hasta los confines del mundo,
han visto la salvación de nuestro Dios.
¡Aclamen al Señor, toda la tierra,
estallen en gritos de alegría!


Marcos 10,28-31.

Pedro le dijo a Jesús: "Tú sabes que nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido".
Jesús respondió: "Les aseguro que el que haya dejado casa, hermanos y hermanas, madre y padre, hijos o campos por mí y por la Buena Noticia,
desde ahora, en este mundo, recibirá el ciento por uno en casas, hermanos y hermanas, madres, hijos y, campos, en medio de las persecuciones; y en el mundo futuro recibirá la Vida eterna.
Muchos de los primeros serán los últimos y los últimos serán los primeros".